Pues sí, unas 120 horas separan Córdoba y Londres. Eso y el madrugón de espanto que nos espera el día D son las cosas que más temo ahora mismo (cómo no, mi archienemigo "el tiempo" siempre presente).
Cada vez está más cerca el día de partida y cada vez son más las mariposas que revolotean por mi estómago. La verdad es que todos los nervios que en un momento dado pueden florecer en mí no se deben a lo que podamos encontrarnos a nuestra llegada, a no tener un sitio seguro donde dormir, ni siquiera al hecho de no tener ni idea de a que zona de la infinita universidad que me aguarda debo acudir mi primer día de clase, el día 22. Todo esto se subsanará, estoy seguro, muy pronto una vez estemos allí. Hoy por hoy, mis inquietudes giran en torno a lo que dejo atrás y a esa inevitable incertidumbre que es el no saber si todo seguirá igual a nuestra vuelta. Pero bueno, supongo que es absurdo plantearse esto ahora. Supongo que todo lo que en mi vida es importante permanecerá inalterable a mi regreso, o al menos eso espero...
Y bueno, tras esta pequeña reflexión personal, decir que estos días son un poco caóticos para mí. Como diría un gran amigo mío "hay tanto que hacer y es tan poco el tiempo que se nos da...". Lo cierto es que entre la inseguridad académica que la universidad de mi ciudad me ofrece, los mil y un sitios a los que aún tengo que ir antes de mi partida para solucionar temas burocráticos y la, a partir de ahora, perenne miseria a la que estoy sometido, estos últimos pasos en Córdoba van a ser más duros de lo que esperaba.
Pero a pesar de lo que pueda parecer y de lo extremadamente negro que estoy pintándolo todo, mis ganas de partir son inmensas. Tan sólo tengo que pensar en todas las novedades que voy a encontrar, en todas las experiencias que voy a vivir, y creedme, en mi cara se dibuja una sonrisa.
3 comentarios:
Qué bonitooooooo! Me ha encantado y has sabido ponerle palabras a lo que yo estoy sintiendo ahora tambien! Cosa que no he sabido hacer yo! Has pensado dedicarte a la escritura ¬¬? Quiero formar parte de este forooooooo por qué no puedo joeeeeeee!!! Es que comentar solo lo que escribis es un rollo! En fin que todo lo que describes ahi me esta pasando igual a mi. Que hoy casi me da un ataque de ansiedad pensando en tdo lo que tengo que hacer y por culpa de la mezcla de sentimientos que tengo, entre nervios y pena y ains! Todo es demasiado complicado jaja! espero que una vez estemos alli sea diferente...y divertido a l menos, porque no se por qué pero últimamente tengo la sensacion de que no va a ser tan bueno cmo quedarme aqui, y me esta haciendo mas complicada la marcha y el estudio del estupido examen del lunes. Buuuuh! me vienen ganas de llorar de repente ¿¿¿por qué??? debería estar feliz! y con ganas de irme. EN fin, espero que sea hormonal :$.
Yo por mi parte no temo a la vuelta. Sigo fiel a mi perpetuo estado de ingravidez emocional que no me permite preocuparme, ni siquiera valorar, el futuro. Ya llegará.
Mariluki no desesperes, verás como todas las dificultades que en un momento dado podamos llegar a pasar, sobre todo al principio (porque es normal, dejamos atrás una vida completamente distinta a la que nos espera) se verán absolutamente compensadas con la cantidad de buenos ratos, nuevos humanos a los que conocer y, sobre todo, con las nuevas e inolvidables experiencias que aún nos restan por vivir.
Tarod, es normal que no le temas a la vuelta, tú y yo sabemos que sólo uno puede ganar nuestra apuesta y, en cualquier caso, ambos perdemos. Te odio.
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